domingo, marzo 08, 2020

CAMINAs

Caminamos por lo que alguna vez fue mi barrio; de ahi ya no queda nadie, me sentí raro. 
Su piel cristalina brillaba, sus ojos delicados me miraban, yo la miraba desde arriba. Se sintió tan pero tan bien. 
Fui a dejarla en su casa. En la puerta de esa quinta, a la que yo ya había ido antes, nos abrazamos muy fuerte, todo su cuerpo cabía entre mis brazos, su olor y su aroma, su perfume y su sudor envolvían todo. 
No me quiero ir, le dije, no quiero que te vayas me dijo. El abrazo continuó, el contacto físico que al principio había sido tímido ahora era lo ideal para los dos.
Subimos a su casa, nos sentamos en un sofá pequeño, se lo dije y no nos importó. Juntos en ese sofa incómodo nos quedamos dormidos. Las campanadas de la iglesia sonaron dos veces, me besó y la besé. 
Si supieras que tu camino te lleva a ese sitio caminarias mas rapido. 
Me encanta tener a alguien con quien caminar al lado. Siempre a tu lado.

jueves, marzo 05, 2020

LO ULTIMO

- compré algo hoy - dijo el

- y ahora que compraste - dijo ella, sabiendo qué todo lo compraba era inútil

- nada, un juego de sábanas nomas, pense que faltaban y las compré - dijo el

- al menos son de algodón - dijo ella. 

Una vez más una pelea estaba por iniciar, al menos eso sentían los dos. Vivir asi era un vaivén de decepciones, música triste de fondo para completar una película que empieza como una comedia romántica pero que acababa como una tragedia europea, de esas tragedias desgarradoras que son la base para alguna película que dura mas de 3 horas y que comienza con un beso apasionado y que termina con un abrazo triste y solitario.

- Cuanto costo? - pregunto ella

- menos de lo que costaron las que compraste tu - contesto el. Penso que la pelea estaba por iniciar.

- ah ok - dijo ella, matando sus ganas de pelear, de discutir, de preocuparse, de amar.

- Si quieres delvuelvelas - dijo el, buscando seguir peleando para aunque sea seguir manteniendo una conversación con ella.

- Haz lo que quieras - dijo ella, negando toda posibilidad de seguir con la conversación. 

El orgullo gana y los dos miran hacia el lado contrario de donde se encontraba el otro. La puerta se entreabrio con un soplo imaginario de tristeza. 

EL CIRCO

El circo llegó a la ciudad, el circo llegó al puerto del Callao, toda su bulla, toda su alegría, sus payasos pintados, su carpa de colores, sus animales flacos, todo el circo estaba aquí, el menor de la familia Polo los había visto desfilar por la avenida sáenz peña, un millón de veces los había visto desfilar, en realidad sólo 6 veces que el recuerde, pero él sentía que mil millones de veces los había visto, y cuando pasaban les tiraba piedras, los insultaba, los agredia, los insultaba para luego a irse a llorar desconsoladamente al rincón dentro del cuarto en el gran castillo donde vivían todos los Polo. Sus padres nunca lo habían podido llevar al circo y por eso ya no se hacía muchas ilusiones con ver todo lo que añoraba y que para el menor de los Polo representaba el circo, su amado circo.
El castillo donde vivia era inmenso, la puerta principal abria en la calle constitución, un jiron antiguo y olvidado,   peligroso, triste y quebrado. Una escalera larga como cuello de jirafa iba desde la calle al segundo piso de una casona antigua, esas de techos altos, donde la mayoria aprovechaba el espacio y construia "altillos"; los Polo no eran la excepcion, alli el ultimo de los Polo guardaba en una botella verde y con corcho grande las monedas que habia recolectado durante todo el año hasta esta fecha, haciendo mandados, vendiendo trastes viejos, corriendo de aqui para alla, arriesgandose en el tranvía a no pagar pasaje, haciendo mil maravillas para un niño pobre que soñaba con gastar hasta el ultimo centavo en su entrada del circo al dia siguente. Y hoy tenia su fortuna contada, sacramentada y completa, lo mas importante de todo completa, su botella verde con corcho grande era su fantasia, no despegaba los ojos de ella, bien escondida de los demas hermanos y de sus padres tambien que como en toda casa pobre a veces hurgan con vergüenza entre las propiedades de los hijos.
Llego la noche y con ella la hora de dormir, el ultimo de los Polo sentia que no podia dormir; miro el reloj y 5 minutos bastaron para que entre en un profundo sueño. Durmio placidamente.
El puerto del Callao desperto temprano ese dia, las autobombas de los bomberos estaban estacionadas frente a lo que fungia de circo de barrio, el humo de brasas, el humo de pelucas, el hedor de animales, el hedor de madera quemada, el humor de plastico quemado, el hedor de colores y sonidos incinerados, el humor de risas carbonizadas, todo mezclado en un pegote que ya no era circo, y frente a todo eso, el ultimo de los Polo con el polo ajado, las zapatillas sucias, la cara atonita y el corazon roto, en una mano su botella verde con corcho grande y en la otra con sus pequeños 5 dedos un puño llenonde frustración, desazón y lección, su primera lección de vida. 
Frente a los escombros y con los ojos llenos de ira, dejo caer la botella verde con corcho grande y se dio media vuelta. Al alejarse una solitaria lagrima recorrio su mejilla.